Cultural

Acuerdo INAH SCT
¿CONSERVACIÓN ARQUEOLÓGICO?

A fin de proteger tres importantes sitios prehispánicos que cuentan con declaratoria federal como Zona de Monumentos Arqueológicos: Tankah y Tulum, en Quintana Roo; e Izapa, en Chiapas, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) construirán dos libramientos carreteros en las autopistas en obra que corren de Cancún a Felipe Carrillo Puerto, y de Tapachula a Talismán.
El acuerdo (una obligación de las instituciones) impulsará preservar el patrimonio cultural de México sin interrumpir el desarrollo de infraestructura necesaria para el país.
Funcionario de la INAH comentan que uno de los principales retos para el Instituto en materia de arqueología es hacer compatible el desarrollo de infraestructura con la conservación del patrimonio y, para ello, es indispensable la comunicación entre las dependencias involucradas.
Para esas dependencias que han ido perdiendo credibilidad y sus discursos utópicos “el acuerdo es un avance importante dentro de las políticas que el Instituto ha impulsado para preservar el patrimonio cultural en el contexto de desarrollos urbanos. Pero el INAH está consciente de que las carreteras son necesarias, de que la infraestructura es necesaria, pero también trabaja en crear conciencia en las otras instancias de que se tiene que proteger el patrimonio de los mexicanos”.
El preproyecto de traza carretera ya fue aceptado por el Instituto en ambos casos y, en cuanto la SCT inicie las obras, arqueólogos del INAH mantendrán una supervisión constante en el campo, lo cual implica que acompañarán a los ingenieros en todo momento.
En caso de localizar vestigios arqueológicos durante las obras, algunas áreas se podrían restringir a la construcción de manera temporal, para que el INAH realice un salvamento arqueológico, o se podrían indicar ajustes al trazo que no impliquen ya mayor impacto para la SCT.
Una de las cualidades de este proyecto que de per se son tardías será por tramos, en el orden que indique su majestad la SCT. Los arqueólogos harán recorridos junto con los ingenieros para ir liberando tramo, espermos que los del INAH los alcancen ya que será por tramo o marcar los salvamentos arqueológicos.
Para CONACULTA la encargada de difundir actor relevantes del gobierno federal, estatal y local comenta con bese en su información que otro “avance importante” en el trabajo conjunto con la SCT, es el acuerdo para compartir información a nivel nacional, no se sabe a ciencia cierta cómo se realizará ya que ambas instituciones tienen muchos conflictos internos y no se ha podido poner de acuerdo.
Es importante mencionar que en fecha próxima entregaremos a la Dirección de Carreteras el informe de las poligonales de 300 sitios arqueológicos para que sean “tomadas en cuenta al momento de hacer la planeación de las carreteras y consideren que no pueden afectar esos lugares”.
Al parecer y dependiendo de las demandas y ofertas, así como de los intereses la SCT acordó presentar todos sus proyectos de obra para que el INAH les indique cual sería la ruta a seguir con menor impacto para el patrimonio. “La finalidad es hacer el procedimiento más rápido y eficiente”.
Como todos sabemos, el INAH trabaja de manera similar con diversas dependencias entre ellos el grupo elitista de Petróleos Mexicanos (Pemex), que no han permitido ingresar a los trabajos a sus verdaderos dueños los mexicanos; la Comisión Federal de Electricidad (CFE), aquella que permite los robos a despoblado en sus cobros de energía y tolera el abuso del 70 por ciento de las industrias de México, y por tal el 30 por ciento aproximadamente: micro negocios y amas de casa, quienes pagan lo que no consumen, y que decir de Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).