Irregularidades en los Registros Civiles DF y Oaxaca
(2 de 3 Partes)
Dirección General
La investigación continúa en torno a las actividades ilícitas dentro de los diversos Registros Civiles de la ciudad de México, quienes se llevaron el primer lugar en corrupción, los más afectados son los gestores de funerarias y la indiferencia se la lleva el público en general, le sigue Oaxaca.
La mayorar parte de las actividades ilícitas se suscitan dentro de las instalaciones de estas dependencias, en primer lugar no hay quien gobierne e imponga la autoridad, en la mayoría de los casos esto se debe a que los trabajadores hacen su voluntad o “de las suyas”, mientras llegan los jueces a trabajar los jueces, al filo de los 9:30 a 10 de la mañana, cuando su entrada es las 8 de mañana.
En diversas ocasiones tramamos de entrevistarlos, lo que recibimos como contestación que “nadie absolutamente nadie puede cuestionar a la autoridad” (juez).
En cuanto a los funcionarios encontramos una total indiferencia ante la ciudadanía. Estos están obligados a dar todo tipo de información, por ejemplo: ante la búsqueda o localización de actas de nacimiento, matrimonio o defunción, para no buscar en los archivos, expedientes y sistemas de cómputo y “evitar la fatiga” los usuarios son enviados a “investigar” a diferentes funerarias o panteones de la ciudad de México, “sí les va bien”, de lo contrario son enviados hasta el Estado de México o interior de la República, “todo un calvario”.
Los más afectados ante estas situaciones son los funerarios o gestores ya que para realizar la “documentación Express” es necesario “entrarle” con 200 hasta mil pesos por trámite, y por tal, los deudos (en caso de defunción) son los más afectados quienes pagan los platos rotos, ya que sus tarifas se incrementan considerablemente por agilizar estos papeles.
Desde Oaxaca con cariño
Otro de los estados que prevalece la corrupción es Oaxaca, en diversas ocasiones nos percatamos de varios abusos, uno de ellos en Santiago Juxtlahuaca, bajo la Tutla de Liborio Cortez Hernández, en donde los cobros son estratosféricos por las correcciones de actas nacimiento, matrimonio o defunción, el cual excede hasta cinco mil pesos por los propios errores.
Tal fue el caso de la señora Elena Abel, de 71 años de edad, y originaria de la localidad, de quien omitimos sus apellidos por razones obvias, en diversas ocasiones solicitó a su “señoría” la aclaración de su acta de nacimiento, teniendo como respuesta el cobro de cinco mil pesos para realizar la corrección, “vine a ver al juez para que me ayude, pero parece todo lo contrario me cobra mucho dinero para realizar mi trámite. Cinco mil pesos de donde los voy a sacar sino tengo nadie quien me ayude (con lágrimas en los ojos) añadió que es para la pensión que le dejó su hijo antes de morir de cáncer en el cerebro ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), quien además me da un plazo de unos días para resolver este problema, de lo contrario no me van a dar nada”
Después de una serie de irregularidades me dirigí –dijo- a Arcos de Belem, a la dirección general, para saber que hacer y me atendió el Hegel Cortes Miranda, director general de la institución, mismo que le llamó la atención a este funcionario corrupto.
(2 de 3 Partes)
Dirección General
La investigación continúa en torno a las actividades ilícitas dentro de los diversos Registros Civiles de la ciudad de México, quienes se llevaron el primer lugar en corrupción, los más afectados son los gestores de funerarias y la indiferencia se la lleva el público en general, le sigue Oaxaca.
La mayorar parte de las actividades ilícitas se suscitan dentro de las instalaciones de estas dependencias, en primer lugar no hay quien gobierne e imponga la autoridad, en la mayoría de los casos esto se debe a que los trabajadores hacen su voluntad o “de las suyas”, mientras llegan los jueces a trabajar los jueces, al filo de los 9:30 a 10 de la mañana, cuando su entrada es las 8 de mañana.
En diversas ocasiones tramamos de entrevistarlos, lo que recibimos como contestación que “nadie absolutamente nadie puede cuestionar a la autoridad” (juez).
En cuanto a los funcionarios encontramos una total indiferencia ante la ciudadanía. Estos están obligados a dar todo tipo de información, por ejemplo: ante la búsqueda o localización de actas de nacimiento, matrimonio o defunción, para no buscar en los archivos, expedientes y sistemas de cómputo y “evitar la fatiga” los usuarios son enviados a “investigar” a diferentes funerarias o panteones de la ciudad de México, “sí les va bien”, de lo contrario son enviados hasta el Estado de México o interior de la República, “todo un calvario”.
Los más afectados ante estas situaciones son los funerarios o gestores ya que para realizar la “documentación Express” es necesario “entrarle” con 200 hasta mil pesos por trámite, y por tal, los deudos (en caso de defunción) son los más afectados quienes pagan los platos rotos, ya que sus tarifas se incrementan considerablemente por agilizar estos papeles.
Desde Oaxaca con cariño
Otro de los estados que prevalece la corrupción es Oaxaca, en diversas ocasiones nos percatamos de varios abusos, uno de ellos en Santiago Juxtlahuaca, bajo la Tutla de Liborio Cortez Hernández, en donde los cobros son estratosféricos por las correcciones de actas nacimiento, matrimonio o defunción, el cual excede hasta cinco mil pesos por los propios errores.
Tal fue el caso de la señora Elena Abel, de 71 años de edad, y originaria de la localidad, de quien omitimos sus apellidos por razones obvias, en diversas ocasiones solicitó a su “señoría” la aclaración de su acta de nacimiento, teniendo como respuesta el cobro de cinco mil pesos para realizar la corrección, “vine a ver al juez para que me ayude, pero parece todo lo contrario me cobra mucho dinero para realizar mi trámite. Cinco mil pesos de donde los voy a sacar sino tengo nadie quien me ayude (con lágrimas en los ojos) añadió que es para la pensión que le dejó su hijo antes de morir de cáncer en el cerebro ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), quien además me da un plazo de unos días para resolver este problema, de lo contrario no me van a dar nada”
Después de una serie de irregularidades me dirigí –dijo- a Arcos de Belem, a la dirección general, para saber que hacer y me atendió el Hegel Cortes Miranda, director general de la institución, mismo que le llamó la atención a este funcionario corrupto.