SENTENCIAN A SUJETO
QUE MATÓ A SU ESPOSA Y
LA ABANDONÓ
EN UN PARAJE
DEL ESTADO DE VERACRUZ
* La pena de 45 años de cárcel
contra el feminicida
* Trató de desviar las investigaciones argumentando
tener alucinaciones y también haber sido secuestrados
* Sentenciado por Juez de
primera instancia
La Policía de Investigación acreditó la participación de un sujeto en la muerte de su esposa por pedirle el
divorcio, cuyo cuerpo abandonó en un paraje del estado de Veracruz, en el año
2011.
A través del Ministerio Público, la Subprocuraduría de
Procesos aportó pruebas que demostraron la participación de Nelson Cuellar
Maya, en el delito de feminicidio, en agravio de Claudia Margarita Méndez Ríos.
Por lo anterior,
el Juez 51 Penal, con sede en el Reclusorio Preventivo Oriente, dictó sentencia
de 45 años de prisión contra el sujeto. En la resolución judicial también se
estableció que Cuellar Maya también deberá pagar 64 mil 674 pesos por
reparación del daño.
Como recordaremos
dentro del expediente 266/2011, el representante social acreditó durante el
juicio que el 3 de noviembre de 2011, el ahora sentenciado y su pareja, quienes
ya vivían separados, acordaron encontrarse para platicar sobre su relación.
La víctima le pidió dinero para gastos de su menor hijo
y al recibir respuesta negativa comenzaron a discutir sobre el trámite para el
divorcio. Cuellar Maya le dijo que no quería separarse de ella, por lo que sacó
una pistola y le disparó en el abdomen.
A bordo de un
automotor, el sujeto se trasladó al municipio de Huayacocotla, Veracruz, donde
abandonó el cuerpo de la mujer, mientras que el automotor también lo dejó.
Cuellar Maya fue encontrado cuando caminaba descalzo por
una carretera y trasladado a un hospital del estado de Tlaxcala, donde señaló
que él y su esposa habían sido secuestrados.
Ya en el Distrito Federal y ante el Ministerio Público,
Nelson Cuellar fingió alucinaciones y se contradijo en varias ocasiones, por lo
que se dio intervención a médicos y
peritos en psicología, quienes determinaron que éstas eran provocadas
voluntariamente para hacer pensar a la autoridad que tenía alucinaciones las cuales
inventaba conscientemente.