FUNDAMENTA ACUSACIÓN CONTRA SECUESTRADORA Y CONFIRMAN SENTENCIA DE 30
AÑOS DE CÁRCEL
* Autoridades de justicia superior confirman sentencia por plagio
* También fue acusada del robo a panadería
* Agravios presentados por MP ratificaron la pena de prisión de primera
instancia
La Policía Capitalina fue notificada de la confirmación de sentencia
contra una mujer que participó en los delitos de secuestro y robó, cometidos en
marzo de 2012.
Informes de la Subprocuraduría de Procesos indican que Magistrados de
la Primera Sala Penal del TSJDF, estudiaron la toca 271/2013 y resolvieron
ratificar la pena de 27 años y seis meses de cárcel, contra María del Carmen
Reséndiz Aviña.
En el expediente se acreditó que la mujer es penalmente responsable de
los delitos imputados, ambos agravados. La secuestradora fue sentenciada en
enero de 2013 por el Juez 69 Penal, bajo la causa penal 60/2012.
Cabe mencionar que en octubre de 21012, Alma Rosa Galicia González,
cómplice de Reséndiz Aviña, recibió sentencia de 30 años de prisión, por los
mismos hechos.
Como recordaremos el 16 de marzo de 2012, María del Carmen Reséndiz y
Alma Galicia, arribaron a una panadería, localizada en la colonia Desarrollo
Urbano Quetzalcóatl, delegación Iztapalapa.
Luego de simular que comprarían pan, amagaron con arma de fuego a la
cajera del establecimiento y la desapoderaron de dinero en efectivo y
pertenencias.
Cinco días después, una de las afectadas salió de su domicilio, ubicado
en la mencionada colonia, para dirigirse a su trabajo y en el camino encontró a
Alma Rosa a quien conocía, por lo que se detuvo a platicar, momento en que fue
interceptada por dos sujetos que conducían un auto compacto.
Los presuntos subieron a la denunciante al asiento trasero y se
marcharon del lugar. Vecinos dieron aviso a las autoridades policíacas, quienes
encontraron el vehículo cerca del sitio de los hechos.
La mujer fue trasladada a una casa de seguridad y ahí le exigieron
dinero para dejarla en libertad. Luego de varias horas, la ofendida convenció a
sus captores para que la dejaran ir por el dinero, ya que sus familiares no
tenían acceso al efectivo.
Luego de haber sido liberada, acudió a denunciar los hechos ante el
Ministerio Público, donde ya se encontraban sus familiares. Posteriormente, las
mujeres fueron aseguradas.
