INICIAN JUICIO FORMAL A PLAGIARIOS DE ESTUDIANTES,
A UNO LE MUTILARON UN DEDO
* Pruebas aportadas por el MP permitieron iniciar el proceso penal
* Presuntamente privaban de la libertad a jóvenes estudiantes
* A uno de los afectados le mutilaron un dedo de la mano
Presuntos integrantes de un grupo delictivo acusados por la Policía de
Investigación de secuestrar estudiantes de la zona sur de la ciudad de México,
fueron notificados, por jueces diferentes, del inicio del juicio penal.
Informes de la Subprocuraduría de Procesos indican que las pruebas
aportadas por el Ministerio Público investigador, acreditaron la presunta
responsabilidad de los involucrados en el delito de secuestro agravado.
El Juez 45 Penal del Reclusorio Preventivo Norte, dictó auto de formal
prisión contra Oscar Beltrán Carrillo, Julián Martínez Santiago, Vicente Daniel
Esquivel Palacios y los hermanos Ulises y Juan Martín Peralta Camacho, quienes
enfrentarán proceso ordinario.
En tanto, su cómplice Juan José Maya Romero, fue notificado, por el
Juez 27 Penal con sede en el Reclusorio Preventivo Oriente, del juicio sumario
en su contra.
Como recordaremos en la causa penal 86/2013, está registrado que la
tarde del 21 de marzo de 2013, dos de las víctimas viajaban a bordo de un
vehículo compacto por calles de la delegación Tlalpan, cuando fueron
interceptadas por dichos sujetos que iban armados.
Amenazados de muerte y golpeados, los denunciantes fueron obligados a
subir a una camioneta y trasladados a una casa de seguridad, localizada en la
carretera Picacho-Ajusco.
Los presuntos plagiarios contactaron a familiares de los afectados para
solicitarles dinero para su rescate. Parientes de los secuestrados denunciaron
el plagio ante la Procuraduría capitalina, donde se iniciaron las pesquisas.
Después de un operativo realizado por elementos de la Policía de
Investigación, las víctimas fueron rescatadas sanas y salvas, mientras que los
implicados fueron asegurados.
Dentro del expediente 82/2013, también se estableció que el 6 de marzo
de 2013, privaron de la libertad al compañero de clases de uno de los probables
responsables, cuando se dirigía a la escuela.
Como medida de presión para los familiares, Juan
Maya Romero mutiló con un hacha la falange del joven, quien fue liberado en la
carretera México-Cuernavaca, tres días después del secuestro.